¡Hola! Si hace un año me iban a decir que terminaría cayendo
en la mayor tendencia en bolsos con el impactante resurgir de la riñonera no me
lo hubiera creído. Pero, sí admito que he sucumbido a este modelo
híbrido de Zara: una riñonera convertible en bolso bandolera.
En 2017, se rompió el tabú de la riñonera, que pasó de ser
ese accesorio hortera de los años 80 a uno de los bolsos más in proclamados por
las pasarelas de todo el mundo. El año pasado, llegó en su versión más
sofisticada: la riñonera de vestir, de estilo más elegante y que se llevaba
sobre todo con americanas y trajes de chaqueta.
Chanel, Prada, Gucci o Hermés han sido sus precursores; el Street
style de las estilistas e influencers, su mejor escaparate; e Inditex ha sido
el encargado de democratizar el deseo de tener una con infinidad de modelos y
diseños, desde el icónico Gucci a las más deportivas en tonos flúor.
El caso es que yo también me he rendido a sus encantos. Y
pese a ser un bolso diminuto, al final todo lo imprescindible te cabe, y es la
máxima exponencia de la comodidad.
Lo que más me ha cautivado de este modelo es que rompe con
la tradicional forma del mítico bolso riñonera. Con un aire más vintage, luce
un estampado de serpiente, destaca el detalle de la solapa con maxi pasador, y
el asa de mano.
Este 2019 seguirá siendo el accesorio estrella de la
temporada, así que me temo que en mi caso particular, saldrá bastante a dar
paseos.
¡Hasta mañana!