¡Hola! La playa es un estado mental, y mantengo esta afirmación
con la convicción de un asesino que se declara culpable tras mi último artículo.
En realidad, estoy deseando estar en la playa de vacaciones
y una forma muy sencilla de materializar este estado de ánimo es empezar a
pensar en los artículos que se necesitan para la playa (cesta de la playa, lecturas
ligeras, un sombrero), y que también puedes utilizar aunque no estés en la
playa.
Os aseguro que funciona porque me he pasado el fin de semana
pasado practicando este tipo de mantra para no sufrir cuando apriete el calor, especialmente
el que irradian el alquitrán y cemento, concretamente de Madrid.
En realidad, no estoy hablando de meditación, ni de mindfulness;
simplemente, se trata de usar un pareo. De hecho, eso es todo lo que he hecho: ponerme
lo que, en principio, está reservado para la playa a kilómetros de la costa más
cercana.
Así es cómo quedaba:
Viernes
Falda pareo de Zara, cazadora vaquera de Desigual, top de Purificación García, sandalias de Mango, pendientes de Asos
Quedó un bonito outfit para ir a trabajar el viernes, si
bien, luego me quedé en casa sin salir. Estaba agotada, y no sé si por toda la
pedrería que llevaba encima entre conchas, abalorios y perlas, o porque fue una
semana infernal.
Sábado noche
Se me ocurrió que para amortizar aún más si cabe esta falda
pareo, podría doblar esta tela de gran tamaño en una especie de pasmina, que me
eché por los hombros a modo de chal.
Al principio te sentirás emocionada por lo astuta que te crees que eres pero
luego te darás cuenta de que tienes poca movilidad si no quieres que empiecen a
sobresalir los volantes de la falda y esta recupere su forma original. Lo mejor
de este apaño, lo bien que me sentaba a la cara su estampado y con el que jugué
con el turquesa en cuello y orejas.
Domingo
Este día renuncié a la sofisticación por el bien de la
comodidad, combinando esta maravillosa falda pareo con denim y unas sandalias
planas de pala. Simplemente quería ir a El Rastro en busca de más artículos
playeros.
¿Fácil, no?
¡Hasta el viernes!
Imagen superior vía Life and Style - Asda